Impactantes los carteles programados para el próximo mes de agosto en la Ciudad Condal. Luego, cargarán la culpa a la política, o a la movida de “los antis”, cuando 
la realidad es que, desde hace mucho tiempo, son los taurinos los que en Barcelona, como en otros muchos lugares, están echando a la gente de la plaza. Una ciudad que contó en su momento con tres cosos en activo y en la que La Monumental fue plaza de temporada, donde ganaron bien merecida fama muchos toreros que de allí salieron catapultados para ocupar los primeros puestos del escalafón, languidece taurinamente hasta el punto de ser prácticamente un cero a la izquierda entre las plazas de primera. Y es que, con semejantes carteles, a nadie le puede extrañar demasiado:
3 de agosto. Toros de Carlos Charro para Juan Bautista, Matías Tejela y El Capea.
10 de agosto. Toros de San Miguel para Eduardo Gallo, Morenito de Aranda y Ángel Teruel.
17 de agosto. Toros de Castillejo de Huebra para Paulita, Alejandro Amaya y Ambel Posada.
24 de agosto. Toros de El Sierro para Alfonso Casado, Raúl Cuadrado y Jiménez Caballero.
¿Así se hace afición?. Carteles ya, no baratos, sino de remate de rebajas; total para unos cuantos guiris despistados que van a pagar la entrada, pongan lo que p
ongan, no merece la pena esforzarse más. Claro que, luego en septiembre, por La Merced, anunciarán a José Tomás y llenarán la plaza, montando, de paso, el consabido numerito -tan absurdo como estéril- del acto de afirmación patriótica que, últimamente, tienen por costumbre, y así mezclar un poco más el culo con las témporas, para que Matilla y El Mesías puedan sacar pecho y presumir de que están levantado la fiesta en Catalunya.
la realidad es que, desde hace mucho tiempo, son los taurinos los que en Barcelona, como en otros muchos lugares, están echando a la gente de la plaza. Una ciudad que contó en su momento con tres cosos en activo y en la que La Monumental fue plaza de temporada, donde ganaron bien merecida fama muchos toreros que de allí salieron catapultados para ocupar los primeros puestos del escalafón, languidece taurinamente hasta el punto de ser prácticamente un cero a la izquierda entre las plazas de primera. Y es que, con semejantes carteles, a nadie le puede extrañar demasiado:3 de agosto. Toros de Carlos Charro para Juan Bautista, Matías Tejela y El Capea.
10 de agosto. Toros de San Miguel para Eduardo Gallo, Morenito de Aranda y Ángel Teruel.
17 de agosto. Toros de Castillejo de Huebra para Paulita, Alejandro Amaya y Ambel Posada.
24 de agosto. Toros de El Sierro para Alfonso Casado, Raúl Cuadrado y Jiménez Caballero.
¿Así se hace afición?. Carteles ya, no baratos, sino de remate de rebajas; total para unos cuantos guiris despistados que van a pagar la entrada, pongan lo que p
ongan, no merece la pena esforzarse más. Claro que, luego en septiembre, por La Merced, anunciarán a José Tomás y llenarán la plaza, montando, de paso, el consabido numerito -tan absurdo como estéril- del acto de afirmación patriótica que, últimamente, tienen por costumbre, y así mezclar un poco más el culo con las témporas, para que Matilla y El Mesías puedan sacar pecho y presumir de que están levantado la fiesta en Catalunya.
2 comentarios:
Te dirán que si los comparas con los carteles de Las Ventas en Agosto,éstos son mucho mejores.
Y también te dirá, que qué van a hacer si hace dos domingos con manzanares y Cayetano había un 1/3 de entradas, y el pasado domingo con Cid-Castella_Perera había poco más de 1/3 sin llegar a la media entrada.
La situación está muy complicada.
Tienes razón,Raúl,la situación es complicada, pero como digo en el post lo que sucede en Barcelona no se producido porque sí, ni de la noche a la mañana. Han sido muchos años de pésima gestión por parte de los herederos de don Pedro Balañá, innumerables temporadas de dar morralla como la que se anuncia para agosto, y demasiado tiempo de echar a los buenos aficionados barceloneses -que los ha habido y todavía los hay- de la plaza. Y,también digo que ésto no sólo ocurre en Barcelona sino en otros muchos lugares, Las Ventas inclusive.
De lo que me quejo, y trato de denunciar, es de que con esta actitud por parte de sus actuales empresarios, lo fácil es echarle la culpa al empedrado (léase políticos, falta de afición, antitaurinos, etc.)cuando ellos en poco, o nada, contribuyen para recuperar a esa afición perdida y que luego tratarán de salvar la cara, mezclando además churras con merinas y utilizndo aspectos que en nada tienen que ver con la taurino, cuando El Mesías Redentor, con gente llegada de otros puntos de todo el orbe taurino,vuelva, como fenómeno mediático y tras una feroz campaña de marketing, a llenar nuevamente La Monumental.
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